martes, 11 de febrero de 2014

Receta salsa brava clásica madrileña

Receta salsa brava clasica madrileña - Patatas bravas
En estos tiempos de ciclogénesis explosiva en los que no apetece ni asomar el hocico por el quicio de la puerta, qué mejor que poner en práctica vuestras dotes culinarias con esta sencilla receta que os traemos para disfrutar de las mejores bravas en casa. Era impensable hacer este blog sin ponerse el delantal de cuando en cuando. En esta ocasión os proponemos la clásica salsa brava madrileña, que como ya hemos comentado en otras ocasiones, está hecha a base de caldo y no de tomate como se suele pensar. Más adelante os pondremos otros tipos de brava para que hagáis la que más os guste.


INGREDIENTES:

- Aceite de oliva (a ver si vais a usar de girasol!!). Aproximadamente 4 cucharadas.
- Pimentón dulce y picante. Unas 3 cucharaditas en total, la proporción ya depende de lo picante que la queráis.
- Harina. Una cucharada.
- Caldo. Normalmente se usa caldo de cocido. Se puede usar otro tipo pero lo suyo es que sea casero, con verduras, huesos, carne y sobre todo jamón.
- Guindillas tipo cayena o similar.


PREPARACIÓN:

Calentar el aceite en una sartén. Cuando esté caliente pero sin echar humo, apartar del fuego un ratito y echar el pimentón. Es muy importante que el aceite no este demasiado caliente, ya que si se quema el pimentón tendréis que volver a la casilla de salida.

A continuación echar la harina y remover bien hasta que se deshaga por completo. Luego ya se trata de ir echando el caldo poco a poco(que tendremos bien caliente) y remover hasta que obtengamos la textura deseada. Probamos por si necesita sal o incluso alguna guindillita si la queréis aún mas picante.


Ya veis qué fácil es de preparar y está para chuparse los dedos. Debido a la sencillez de los ingredientes, es importante que sean de la mejor calidad, fundamentalmente el caldo. Y si el pimentón es de La Vera, mejor que mejor. 

Si queréis hacer las patatas, simplemente hay que cortarlas en dados gruesos y echarlas en aceite no muy caliente. Cuando estén blanditas ponéis el aceite a tope y en cuanto notéis que están un pelín doradas, ¡pa fuera!

¡¡Esperamos que os guste!!

domingo, 2 de febrero de 2014

LA CHULA DE CHAMBERÍ

La Chula de Chamberí, calle Fernando el Santo, 11 Madrid - Patatas bravas



Volvemos al bravero barrio de Chamberí. La Chula es uno de esos locales tan de moda con las raciones escritas en las paredes, decoración ladrillera, hilo musical y luz tenue donde lo mismo te puedes pimplar unos callos como un buen copazo. Nada más entrar te envuelve ese ambiente chic donde quedarás en evidencia en caso de que un cocodrilo no adorne tu jersey. Y es que las bravas es un aperitivo para todos los bolsillos e ideologías (la sede del PePé está al lado).

Es bastante recogidito por lo que no es fácil hacerte sitio. Pedimos las obligatorias cañas Mahou, muy bien tiradas, aunque dudamos en pillar un vinito dada la amplia oferta de la que disponen. De aperitivo unas olivas mu bien aliñás con su platito para dejar los huesos (detallazo). Normal que el suelo esté impoluto, podrían comerse las bravas en él.

Pedimos la ración de bravas y el atento camarero nos trajo el pan enseguidita en un estrafalario recipiente. Pero para original la presentación de las bravas. Te las ponen en un cucurucho de papel, que a su vez viene dentro de un cesto metálico como los de las freidoras. Todo muy moderno y claro, eso hay que pagarlo: 6€ y es lo más barato.

La salsa es abundante y destaca su aroma entre pimentón y chori. Tiene un sutil toque rancio y cuanto más comes más pican. La verdad que está buena. Las patatas están cortadas en dados pequeños quedando las aristas crujientes pero el interior tierno, en ocasiones demasiado ya que las últimas parecían puré. El cestillo engaña, trae más patatas de lo que parece a simple vista, aunque al final resulta incomodísimo porque no ves lo que pinchas y encima la salsa se queda impregnada en el papel...¡así no hay quién moje!


SALSA: 7'5
PATATAS: 6
CANTIDAD/PRECIO: 5
OTROS: 5

TOTAL: 6'7

Pues eso, unas bravas de casi notable para un local de moda. Si te va este ambiente y te quieres dar un caprichillo, pruébalo.